domingo, 28 de abril de 2013

¿Adiós? ¿Hasta pronto? ¿Hasta nunca? ¿Hasta siempre?

¿Qué pasa cuando todo el mundo cambia a tu al rededor? ¿Qué pasa cuando te das cuenta de que las personas en las que más confiabas y a las que más querías han cambiado demasiado y ya no son como eras? ¿Qué pasa cuando tú te quedas estática y no cambias como los demás?
Eso es lo que se me pasa por a cabeza ahora. No entiendo cómo puede cambiar tanto la gente por una polla o por un coño, y sí, ahora me refiero al órgano sexual y no a la persona que va unida a él, a eso iré después.
Me parece increíble como en un par de meses la gente hace de su pareja su vida olvidándose de que tiene la suya propia y no quieren darse cuenta de que eso algún día acabará, estarán jodidos y cuando realmente lo necesiten no tendrán a nadie que vaya a consolarles porque han cambiado a todas las personas que de verdad la querían por gente que estará de paso en su vida unos meses.
¿De verdad te merece la pena? Sé que yo no te puedo dar consejos de en qué posturas te puedes tirar a tu novio, ni te puedo prestar ropa, ni salir contigo de fiesta. Sé que pensamos de manera diferente, que no somos para nada iguales, pero tampoco quería serlo. Eso es lo que nos hacía amigas, que eramos diferentes.
Ahora tú me usas cuando no tienes a nadie con quien salir, me dejas de hablar y si no te hablo yo puedes estar vidas enteras sin decirme nada. Cuando me preocupo por ti siempre tienes alguna escusa para no contarme qué cojones te pasa, confías antes en los demás que en mi cuando creo que te he demostrado una y mil veces que puedes confiar en mi, y creo que ya deberías haber aprendido que los demás te dan la patada antes o después.
Últimamente cuando hemos quedado siempre nos quedamos en alguna casa viendo una peli, lo que me hace pensar que te avergüenzas de mi.
Pues muy bien, chiqui.
Hasta aquí ha llegado mi paciencia. Hártame de friki, de gilipollas, de lo que tú quieras, pero que sepas que conmigo el ir de victima no te funciona. Que sepas que ellos se van a acabar cansando de ti, como hace todo el mundo, y te quedarás sola. Que sepas que yo ya no estaré allí.

sábado, 6 de abril de 2013

¿Compartimos primavera?

Es curioso, me gustas y no quiero que me gustes. No sé si te gusto y no sé si lo quiero saber.
Es curioso que me ande quejando de que no tengo novio y que cuando se me presenta la oportunidad de decirle que me gusta deshecho la idea al segundo de que se me venga a la cabeza.
Lo hago porque tengo miedo. Tengo mucho mucho miedo. Te tengo miedo a ti, a mi, a que no te guste, a que no sepa reaccionar, a bloquearme, a romper la amistad, a que sea incomodo, a que no funcione, a que se acabe, a que te vayas, a que me vaya, a hacerte daño, a hacerme daño, a que te hagas daño y a que me hagas daño. Tengo miedo a una infinidad de cosas y esto, obviamente, tú jamás lo sabrás porque en realidad soy demasiado cobarde para decírtelo.
No sé si es mi inseguridad mezclada con todas las hostias que me he dado en el tema del amor. Si es que nunca he sido capaz de declararme directamente a alguien, de decir te quiero, de sonreír sin miedo a lo que piensen los demás de nosotros. Quizá sea porque eso solo me haya pasado una vez, y la vez que me pasó me engañaron de tal manera que aun sigo con cara de gilipollas y eso que se acabó hace más de un año.
No sé si es que te tengo miedo. No sé si es que me tengo miedo. No sé si soy gilipollas. No sé si me arrepiento. No sé si quiero que lo sepas. No sé si quiero saberlo. No sé nada en realidad.
Pero déjame que te diga que si algún día me dejas que te quiera, te querré a mi manera. Déjame que te diga que algún día seremos felices los dos juntos, que compartiremos amaneceres, primaveras, cama y almohada. Déjame que te quiera como a nadie, déjame que te quiera hasta que duela. A cambio solo te prometo hacerte feliz. Te prometo que no todos los días serán buenos, pero sí que serán los mejores. Te prometo que me dejaré querer. Te prometo que no seremos una pareja convencional. No quiero seguir estereotipos, ni modas, ni guiarme por lo que diga la gente. Quiero sentir y hacer lo que siento y lo que creo correcto. Quiero ir por la calle contigo, de la mano, y ser la envidia de todo el mundo. Quiero hacer el bobo y reírnos, quiero que te de igual mi aspecto. Quiero que me quieras.
Quizá pida demasiado. Quizá nunca se cumpla. Habrá que esperar para averiguarlo.
Mientras tanto yo seguiré hablando contigo como si nada de esto se me pasase por la cabeza. Mientras tanto seguiré comiéndome el coco. Mientras tanto seguiré intentando superar mis miedos.

http://www.youtube.com/watch?feature=endscreen&v=dwkhehvXnlk&NR=1